Bienvenidos una vez más a Pluma Negra. Hoy tal vez me salte un poco, pero solo un poco, la temática principal de este blog, porque al fin y al cabo, ¿Qué es si no una partida de rol que otra manera de contar una historia?
En efecto, en esta entrada hablaré un poco a modo de reseña de otra de mis pequeñas aficiones, el maravilloso mundillo del rol, más en concreto hablaré sobre Pathfinder, el juego de rol al que un grupo de amigos y yo hemos empezado a jugar este año, y no se me ocurre mejor manera de hablar sobre ello que con esta pequeña reseña sobre la partida que tuvimos el Sábado pasado.
Pues aprovechando que justamente era el cumpleaños de uno de los amigos con los que jugué, acababan de regalarle la "Caja de Bestiario" la cual no es más que una de las numerosas expansiones del juego, que como ya habréis podido deducir, dicha caja contiene numerosas ilustraciones en cartón con sus respectivas peanas para representar lo que viene siendo algunas de las criaturas enemigas que podemos encontrar a lo largo de nuestra aventura, y evidentemente, dicho cumpleañero que a la vez también interpretó el papel de master de la partida, quiso aprovechar inmediatamente su regalo para ponérnoslo difícil. Debo decir también, que a pesar de que yo llevaré más de diez años aficionado al mundo del rol, era la segunda partida de Pathfinde en concreto en la que participaba. Mi personaje era el mismo que el de la primera partida que tuvimos a modo de prueba y por lo tanto en esta ocasión, manejarlo me resultó bastante más fácil en comparación a la primera vez, pero tengo de admitir que en principio preparar su ficha me resultó algo complicado.
Pero pronto pude solucionar el "problema", no tardé en darme cuenta de que Pathfinder lleva una base muy de Dungeons&Dragons como la gran mayoría de juegos de rol, y pensándolo de esta manera y junto a los conocimientos de rol que ya tenía de partidas anteriores a otros juegos, pude terminar la ficha de mi personaje sin problemas, y realmente, aunque preparar la ficha conlleve a realizar varios cálculos a la hora de determinar los atributos de tu personaje, al ponerlo luego en práctica te das cuenta de que no era tan complicado como parecía e incluso resulta realmente sencillo a la hora de tirar los dados y tener que hacer cálculos en mitad de la partida. 
Entonces, con las fichas de nuestros personajes preparadas y con el master llevando también una ligera idea de lo que iba a ser la historia que nos iba a plantear, prácticamente ya lo teníamos todo listo para empezar. En esta ocasión, éramos tan solo tres jugadores: en mi caso, mi personaje era un enano/guerrero el cual busca venganza contra cierta banda de orcos la cual arrasó con su poblado; uno de mis compañeros, era un mediano/mercader el cual buscaba a su hermano gemelo desaparecido, y en cuanto al tercer personaje, era un misterioso elfo/clérigo el cual decidió por el momento ocultarnos su pasado e identidad.
Como habréis podido observar en las fotos, de momento las miniaturas y escenografía que disponemos no es muy amplia pero con ello nos apañamos bastante bien, la mayoría de las miniaturas de las que disponemos son de El Señor de los Anillos, de Warhamer o bien del juego de mesa que Dungeons&Dragons sacó en su día, el cual como veréis más adelante, este último también nos resultó bastante útil para la recta final de la partida. Además, previamente también habíamos imprimido el mapa de un poblado para situarnos mejor, ya que sería el lugar donde empezaría la aventura, pues somos de pensar que cualquier elemento que os venga bien para representar la partida o cualquier otra cosa, siempre es bienvenido
Pues tal y como acabo de comentar, la partida empezaría en un poblado cualquiera siendo nuestros personajes completos desconocidos entre ellos, cada uno de ellos había acabado en aquel poblado por sus propios motivos y finalidades, y en cuanto se enteraron de que alguien andaba buscando valientes guerreros para escoltar un carromato con importante mercancía hasta el pueblo vecino, no dudaron en apuntarse a la aventura con tal de sacar una buena recompensa por ello, no sin antes mostrar el mediano/mercader un gran interés por ello e intentando negociar una recompensa mejor para todos.
Y como era de esperar, no tardarían mucho en llegar los peligros, pues bien entrada la noche, la niebla empezó a apoderarse del bosque que nos encontrábamos recorriendo siendo esta el telón de apertura para la banda de Esqueletos que nos atacaron. Fue una dura batalla en la cual el enano se lanzó al peligro con todas sus fuerzas (a pesar de una pifia) mientras que sería el elfo tal vez el peor parado al principio aunque sus hechizos, los cuales tenían cierta ventaja ante los Esqueletos, fueron también de gran ayuda, mientras que por otro lado, el mediano se dedicó principalmente a subirse a los árboles para intentar lanzarles ramas, así que viendo el panorama, la mejor opción que tuvo el dueño del carromato fue salir corriendo mientras que los aventureros hacían frente a los Esqueletos, que por suerte, lograron acabar con ellos al destruir cierta Pirámide Mágica que encontraron oculta en el bosque.
Pero las aventuras no quedaron aquí, tras superar a duras penas la dura misión y pasar la noche en la posada del pueblo vecino, una vez tuvieron las pilas recargadas decidieron ir de nuevo en busca de aventuras y de inspeccionar mazmorras con tal de conseguir oro y material suficiente y poder abrir una tienda en un futuro. Y así fue, sería el enano el encargado de buscar información en el pueblo mientras el mediano se encargaba de sus asuntos y finalmente obtuvieron la ubicación de una mazmorra no muy lejos de allí, así que tras comprar las provisiones necesarias, partieron a dicha mazmorra. Como podéis observar en la foto, para esta parte de la partida utilizamos un tablero de los que venía en el juego de mesa de Dungeons&Dragons que mencioné anteriormente.
Parecía que se trataba de una mazmorra muy pequeña y no tuvimos mucho problema en adentrarnos en ella. Utilizamos algunas de las habilidades de nuestros personajes como por ejemplo la habilidad del elfo para poder alumbrar en zonas oscuras y la bonificación especial del enano para encontrar trampas y puertas secretas sobre piedra, y una vez dentro, fuimos sorprendidos por dos Goblins armados con arcos los cuales uno de ellos fue aniquilado por una carga del enano con tirada crítica y el otro asustado acabó saliendo corriendo.
Acto seguido y después de encontrar algún que otro tesoro, llegamos a la parte más profunda de la mazmorra donde todavía se encontraba el Goblin asustadizo y para nuestra sorpresa, nos encontramos con un Orco el cual evidentemente tenía unos atributos superiores a los de los Goblins. Tras ello, y después de darnos cuenta de que aquella mazmorra no escondía tantos tesoros como parecía, derrotamos al poderoso Orco y logramos salir con vida, ya pensando en la que sería nuestra siguiente aventura y en nuestra próxima mazmorra que explorar.Y para terminar, espero que os haya gustado esta entrada tal vez algo diferente a las que suelo hacer aunque en cierto modo, no deja de ser una reseña a otra manera de contar una historia. A los aficionados al rol ya sabéis de los que hablo, por otro lado, si nunca has jugado y tienes cierto interés, te recomiendo que no dudes en apuntarte a la aventura, pues llega a resultar muy divertido pasar una tarde con amigos viviendo numerosas aventuras sin ni siquiera la necesidad de tener que salir de casa, yo mientras tanto, no descarto en un futuro hacer alguna que otra reseña más centrada en el mundillo del rol.
¡Nos vemos en la próxima entrada! Que si no pasa nada, será dentro de muy poco ;)
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